Visibilizar aquellos ritos quechuas en los que las mujeres son quienes nutren y dan sentido, no solo simbólico, sino también vivencial, a las expresiones culturales, es una necesidad y un desafío que fue puesto en acción el día jueves, 29 de septiembre en el complejo ecoturístico “La Vendimia”, durante el encuentro de Representantes Estudiantiles y Grupos de Diálogo y Reflexión de Mujeres Adolescentes Indígenas, promovido por Yachay Tinkuy, en coordinación con Radio Cepja, ambos, espacios operativos de actuación de la Asociación Cultural Amistad y Ciencia.


Estudiantes de diez unidades educativas, tanto de las áreas rurales -Colomi, Anzaldo y Santiváñez-, como periurbanas -zona Sur de la ciudad de Cochabamba-, se implicaron en rememorar, valorar y promover la ética que sustenta el rito del Quya Raymi: La celebración de lo femenino y de toda forma de vida, el cuidado, la complementariedad y relacionalidad entre todo lo que existe en este mundo.

A partir de un proceso reflexivo, las y los estudiantes se constituyeron en promotores de sensibilización respecto de un pensar, sentir y actuar transformador, desde una rebeldía propositiva que apunta a descubrir nuestro lugar en el mundo, nuestra identidad y la comprehensión de nosotras y nosotros mismos, siempre en interrelación con la comunidad y el contexto en el que vivimos.

La representación del Quya Raymi

Estudiantes de diez unidades educativas, tanto de las áreas rurales -Colomi, Anzaldo y Santiváñez-, como periurbanas -zona Sur de la ciudad de Cochabamba-, se implicaron en rememorar, valorar y promover la ética que sustenta el rito del Quya Raymi: La celebración de lo femenino y de toda forma de vida, el cuidado, la complementariedad y relacionalidad entre todo lo que existe en este mundo.

A partir de un proceso reflexivo, las y los estudiantes se constituyeron en promotores de sensibilización respecto de un pensar, sentir y actuar transformador, desde una rebeldía propositiva que apunta a descubrir nuestro lugar en el mundo, nuestra identidad y la comprehensión de nosotras y nosotros mismos, siempre en interrelación con la comunidad y el contexto en el que vivimos.

Diseñando sus producciones audiovisuales

Acudiendo al uso crítico de la tecnología, elaboraron producciones en diferentes formatos audiovisuales -que dicho sea de paso son tan difundidos entre las y los jóvenes-, cuestionando la violencia de género y hacia la naturaleza, para ser posteados en las redes sociales.

Así, el principio de armonía con la Madre Tierra, siempre nombrado, pero casi nunca vivenciado, se hizo carne en la vida de las y los participantes y, por qué no decirlo, en la nuestra.